Centro Histórico de Quito
El Centro Histórico de Quito es el más grande de América. La mayor
parte de sus edificios han resistido los embates de la naturaleza y
tribulaciones del hombre. Las diversas culturas de la ciudad han
engendrado un tesoro lleno de riqueza artística, cultural e histórica,
que ha sido cuidado a través de los siglos hasta el presente. Por esta
razón fue reconocido por la UNESCO, en noviembre de 1978 como el Primer
Patrimonio Cultural de la Humanidad. Alberga iglesias, capillas,
monasterios y conventos coloniales, plazas, museos y encantadores patios
internos, edificaciones republicanas e interesante arquitectura de
inicios del siglo XX, además de obras contemporáneas notables que hacen
de este un lugar de enorme valor histórico, arquitectónico y estético.
La loma del Panecillo, con tres mil metros de altitud sobre el nivel
del mar, es una referencia para los quiteños porque marca la división
entre el sur y el centro de la ciudad y aún mantiene el legado de la
época incaica porque allí se encuentra la Olla del Panecillo, una
especie de cisterna circular de ocho metros de profundidad que fue
utilizado para el riego de sembríos.
La Plaza Grande o de la Independencia alberga en su corazón el
Monumento a la Independencia, de estilo neoclásico, y a cuatro pilares
de la sociedad ecuatoriana: la Catedral, el Palacio Presidencial, el
Palacio Municipal y el Palacio Arzobispal. Aparte de brindar un vistazo a
la vida de los quiteños que allí se reúnen, es un buen punto de partida
para adentrarse en un mundo donde lo inverosímil es real. Una visita a
la Catedral, templo de tres naves que se erige como uno de los símbolos
religiosos de mayor valor espiritual para los quiteños, es de rigor.
Allí se encuentran sepultadas algunas de las personalidades políticas
más relevantes de este país andino.
Muy cerca de la Plaza Grande se encuentra otro punto obligatorio: la
Iglesia de la Compañía de Jesús, el templo barroco más importante de
Quito y un edificio que, por sí solo, hace valer la visita a esta
ciudad. El esplendor que derrocha el interior de esta iglesia la
convierte en el edificio colonial y religioso de mayor envergadura
dentro del área. Sus columnas salomónicas, los distintos símbolos
tallados en piedra volcánica, las influencias moriscas visibles en la
ornamentación del techo y, sobre todo, un espectáculo de pan de oro, de
siete toneladas, cubren rigurosamente el interior, produciendo gran
admiración entre los visitantes.
Siguiendo con la caminata, avanzamos hacia la Plaza de San Francisco y
su mítica iglesia, la más vieja de Quito. La Iglesia de San Francisco
es un templo verdaderamente imponente, con una fachada simétrica,
paredes blancas en las que sobresalen dos campanarios gemelos y un
hermoso portón tallado en piedra. Es una iglesia en la que la presencia
del humilde mestizo, los tablones de madera rústica y la música de un
legendario órgano crean un ambiente de espiritual tibieza.
Recorrer el centro histórico de Quito es una de las mejores actividades que se puede desarrollar en su visita al Ecuador.
Quito Moderno
Quito no son solo iglesias, conventos y museos, si no también
modernos centros comerciales, glamorosos bares, centros de diversión y
restaurantes de la mas variada comida nacional e internacional,
complementando este gran conjunto coexisten también las principales
cadenas hoteleras del planeta.
El Quito moderno empieza en los parques El Ejido y La Alameda y se
extiende hasta el inicio de la carretera que conduce a la Ciudad Mitad
del Mundo. La zona norte de la capital ecuatoriana es un escenario
cosmopolita con variedad de atractivos para que su visita sea completa.
La Mariscal, conocida como "gringolandia", es una parte del Quito
moderno; se encuentra ubicada al centro norte de la ciudad, y es aquí
donde la mayoría de extranjeros convergen por todas las facilidades que
esta ofrece, aqui encontramos una concentración de bancos, hoteles,
restaurantes, bares, discotecas, cibercafes, galerías, entre otros.
En el corazón de ese Quito moderno se encuentran ‘dos pulmones’ para
el sano esparcimiento: los parques La Carolina y el Metropolitano. Allí
se reúnen los capitalinos para caminar, correr, llevar las mascotas,
hacer volar las cometas, hacer todo tipo de ejercicios. Y a estos dos
pulmones se les puede añadir un espacio con toda la oferta para el
turismo nacional e internacional
Los Valles de Quito
Debido al crecimiento poblacional de la ciudad en las últimas décadas
y al gran crecimiento urbanístico que ha tenido la ciudad, la población
ha ido expandiéndose hasta los valles aledaños al oriente de la ciudad,
los mismos que forman parte del Distrito Metropolitano de Quito. Al
norte de la ciudad se encuentran los valles de Calderón y la Mitad del
Mundo. Al nororiente se encuentran los valles de Cumbayá y Tumbaco,
mientras que al suroriente, se encuentra el valle de los Chillos,
conformado por los pueblos de San Rafael, Conocoto, Sangoloquí, El
Tingo, entre otros.
En los valles de Quito usted se econtrará con un clima placentero y
centros de recreación, además podrá disfrutar de una gran variedad de
frutas de la región.